24- Esquiando en Keystone y Vail, Colorado + Snowday

¡Hola hola! ¡Bienvenidos a la vigésimo cuarta entrada de Juanri en Chicago! ¡¡¡¡Hoy por fin toca hablar de montañas!!!!!! ¿Que por qué lo pongo con tantas exclamaciones?? Porque en Illinois no tenemos ni una, así que me fui a buscarlas. A Colorado. ¡EMPEZAMOS!
Foto en la estación de esquí de Vail, considerada una de las mejores del mundo. De iz a derecha: María, Juanri, Sito y Ana.

Resulta que a los que nos gusta esquiar, se nos convence bastante rápido de viajes a la nieve. Poco antes de navidad, mi amigo Sito creó un grupo de Whatsapp para irnos a esquiar a Colorado, y desde que lo creó hasta que compramos los vuelos, no pasó ni media hora. Y allí que nos fuimos el fin de semana pasado, de viernes a domingo (nos pedimos el día libre en el cole. En este país si un día no quieres ir a trabajar porque tienes un viaje o no te da la gana, pues no vas. Eso sí, ""solo"" lo puedes hacer 15 veces al año y gastando días de estar enfermo). 
Fuimos a casa de una amiga de Sito que también es profesora visitante en Colorado (María). Gracias a ella, nos ahorramos un dineral entre el alojamiento y los descuentos que nos consiguió para esquiar. Pero eso luego lo cuento, primero llega la odisea en el aeropuerto.
Salimos de Chicago a las 6:30 de la madrugada y llegamos a Denver, Colorado a las 8 de la mañana (con una hora menos de diferencia horaria) y lo primero que me encuentro al llegar a la cinta de recogida de maletas, es esta cinta especial para equipaje de ski:

+10 para Denver. ¡Se nota que es destino de esquiadores! No había visto algo así en mi vida.
Lo segundo que vi, fue esta estructura con todos los estados de EEUU con sus características de cada uno, me encantó, y nos hicimos una foto:

Pues nos perdieron la maleta, a nosotros y a 40 personas más del avión. Solo facturamos una maleta entre los 3 para meter dentro todo el material de esquí, el resto de ropa la llevamos en la maleta de mano. Como ya teníamos comprado el forfait (aquí le llaman Lift Tickets) y no queríamos perder el día de esquí, decidimos ponernos unas mallas debajo de los vaqueros, ¡y a esquiar! Mi primer día de esquí en Estados Unidos iba a ser en vaqueros. Pues bien. 



Por suerte, esa misma tarde, el aeropuerto nos llevó la maleta a casa. Nosotros estuvimos esquiando y se la dejaron a la compañera de piso de María.
El viernes estuvimos esquiando en Keystone, ¡una estación de esquí abierta hasta las 20:00! ¡Podíamos esquiar de noche! Fue increíble!
Keystone de noche. Al fondo, el pueblo.

Cuando hice este salto pensé que había saltado 2 metros y que el vídeo quedaría más o menos así:
Más tarde cuando vi el vídeo me di cuenta que parecía un salto de un niño de 3 años. O peor.
La calidad de la nieve era increíble durante todo el día. Estaba igual de bien a las 10 de la mañana que a las 7 de la tarde. Supongo que tendrá que ver la altura de la estación (llega hasta los 3600 metros de máxima). De temperatura no estuvimos nada mal, entre -2 y 2 grados aprox.
Cuando volvimos a casa, nos duchamos, cenamos y nos fuimos a una fiesta de los años 80. ¡Espectacular! 


Nos juntamos con otros profesores visitantes en Colorado y me di cuenta de lo pequeño que es el mundo. Me encontré un matrimonio de Castellón, y que él ¡ERA DE SEGORBE! a tan solo 3 km de mi pueblo (Castellnovo), y ella trabajaba en un cole de Benicassim. ¡Por supuesto tenía varios amigos en común con ambos!
El pueblo donde nos alojábamos (Frisco) es el típico pueblo de película americana de esquí. Pequeño, y rodeado de montañas nevadas y enormes. 


Al día siguiente, fuimos a Vail, otra estación de esquí en Colorado. Los autóctonos de la zona dicen que es de las mejores del mundo, incluso mejor que la famosa Aspen. Lo malo, el precio. 195 dólares por esquiar un día. Lo bueno, que María tenía sus contactos y consiguó 3 descuentos del 50% y 20%. Al final, esquiamos los 3 por 111 $. Más barato incluso que en Keystone. Y más caro que cualquier estación de esquí de España. La calidad de la nieve, como ya he dicho, era muy buena, pero creo que no vale la pena pagar tanto. Aunque  por supuesto, lo pasamos genial:
Este era el punto más alto de Vail, a casi 3600 metros de altura. Es el punto más alto que he estado en toda mi vida pisando tierra. El pico anterior fue cuando subí al Monte Perdido, pero está "solo" a 3355 metros. Pues estuvimos esquiando a casi 300 metros más. Me encantó.

Otra cosa que me llamó la atención fue el color de las pistas. En España, dependiendo de su dificultad, tenemos verdes, azules, rojas y negras. Pues aquí hay: Verde, Azul, Diamante y doble Diamante:
Y claro, no nos íbamos a ir de Colorado sin bajar por un par de pistas doble diamante. La única diferencia es que tienen muchas bañeras. Pero para lo expertos de Sito y Juanri fue bastante fácil. Ana y María sudaron un poquito más.
El sábado por la noche volvimos al aeropuerto de Denver sobre las 2 de la madrugada. Fue un viaje express de 48 horas pero lo exprimimos al máximo y no nos faltó de nada.
Gracias a María nos ahorramos más de 300 dólares cada uno por el alojamiento y los descuentos de los forfaits. Además, nos devolvieron el dinero de la maleta facturada y nos indemnizaron con 100 dólares a cada uno para gastar en vuelos de la aerolínea. Un viaje de 10 y completo! Encima tuvimos suerte al aterrizar en Chicago porque 1 hora después ya no pudieron aterrizar más aviones porque había un temporal de nieve.
Hasta ahora, solo había visitado las grandes ciudades de Estados Unidos y todavía no había visto su naturaleza y montañas. Este viaje ha sido la otra cara de este país. Ahora que ya la he conocido, me ha encantado y es probable que me quede un año más. ¡Será un año de parques nacionales! Pero ya veremos, aún queda mucho para decidirlo.
La tarde del domingo, vimos la famosísima Super Bowl en casa con otros profesores visitantes. Menudo rollazo. Es el evento televisivo con más audiencia de toda América, pero es igual de aburrido que el Curling.
Cómo no, hice un vídeo de este viaje. Si aún no lo habéis visto, aquí lo tienes!


Y para ir acabando...
Esta semana ha hecho frío de verdad en Chicago, hemos llegado a -17 grados con sensación térmica de -22. Pero como las prioridades son las prioridades, he salido a correr todos los días por el lago ya que solo faltan 9 semanas para el maratón de Boston:



Si te abrigas bien, no pasas frío. Lo digo en serio. Soy bastante friolero y en 4 días que he ido a correr solo me han dolido un poco los pulmones por respirar aire muy frío, pero nada más.
Ayer jueves, a las 4 de la tarde, anunciaron que cerraban nuestro distrito escolar (y otro centenar de distritos escolares) ya que se preveía un temporal de nieve. Se hace un comunicado oficial en esta página web. Aunque yo me enteré porque varios compañeros de trabajo me enviaron un mensaje. Pues bien, a las 4 de la tarde del jueves, se convirtió en un juernes. Así que salimos a cenar y a tomar unas cervezas con los profesores visitantes.:




Cuando estábamos cenando, vi al encargado del bar quitando la nieve de la acera, ya que si no la quitas, la multa es de 200 $. Y salí a ayudarle:

Al volver a casa, hicimos algunos ppvv 4 ángeles en la nieve:


¡Y hasta aquí la vigésimo cuarta entrada! ¡Espero que os haya gustado!
¡La semana que viene volvemos a viajar, esta vez nos toca San Francisco!


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